En realidad, sabías que era una cuestión de tiempo. Todas las actividades que realizamos en la vida exigen una inversión. Al principio, podemos recurrir a los alquileres de materiales o a los instrumentos musicales de segunda mano, pero llega un momento en que queremos disfrutar de un equipo propio nuevo y personalizado. Y eso también pasa con las actividades de nuestros hijos.
En ese caso, más aún. Basta que demuestren vocación por una actividad concreta para que todo se nos haga poco y nos volquemos en sus necesidades. Pero cuando hablamos de instrumentos musicales las cosas se complican. Porque, según el instrumento del que hablemos, los precios pueden subir a varios miles de euros.
Tarde o temprano tendrás que afrontar la compra de un buen instrumento
La evolución es continua y puede avanzar despacio, con instrumentos de gama media y precios todavía asequibles, pero en algún momento, tendrás que tomar la decisión de invertir en un buen instrumento musical que acompañe al músico para toda la vida. Y no son inversiones pequeñas.
Dependiendo del instrumento y la calidad, sin entrar en pianos de cola o violines Stradivarius, en mantenimientos, partituras, afinaciones o materiales adicionales, una horquilla de lo que puede costar un buen instrumento musical puede situarse entre los 4.000 y los 15.000 euros. Pero hablamos de un beneficio para la educación de tus hijos y de una vocación que no tienen todos los niños. No es un capricho y tendrás que valorar cómo afrontar el gasto que viene.
Afortunadamente, las empresas de créditos al consumo tienen productos específicos para este tipo de financiaciones. Si has visto venir que la vocación de tu hijo iba en serio, has podido ir preparando una hucha que te permitiera afrontar la adquisición de su nuevo instrumento musical. Pese a ello, quizás no tengas suficiente dinero ahorrado para poder darle una herramienta que le permita avanzar en su vocación.
Hay que renovarlos o actualizarlos cada cierto tiempo
De ser así, la mejor alternativa es la financiación de los instrumentos musicales. Sobre todo, porque es muy posible que ese instrumento musical que vas a comprar ahora no sea el último y necesites afrontar en unos pocos años una nueva renovación.
Si el músico que tienes en casa se decanta por el piano o la batería es complicado que pueda retener los instrumentos con los que ha ido evolucionando, pero si se trata de otros instrumentos que no tienen tantos problemas de espacio es muy probable que se niegue a deshacerse de ellos. Por lo tanto, olvídate de vender los viejos para financiar los nuevos.
Dicen los expertos que los músicos son muy suyos con sus instrumentos y que crean un vínculo sentimental con ellos muy grande. Por ese motivo, comprar un nuevo instrumento musical es complicado y lleva tiempo (cada renovación, más tiempo). En cualquier caso, nunca será una compra impulsiva ni una decisión rápida porque precisará de mucho asesoramiento profesional, dependiendo del nivel y de los objetivos del músico.
Así, la financiación de un nuevo instrumento musical para tus hijos no puedes hacerla a largo plazo. Es difícil que este nuevo instrumento dure más de cuatro años antes de que tengas que afrontar una renovación o mejora.
Por lo tanto, nuestro consejo es que, dependiendo del tipo de instrumento y bajo el asesoramiento siempre de los profesores y de los profesionales de las tiendas especializadas, no busques financiaciones más allá de los cuatro años (72 meses) para que las actualizaciones futuras no se vean frenadas. Si puedes, mientras financias un instrumento, prepara el ahorro para el siguiente porque siempre será más caro que el anterior.
Hay créditos específicos para renovar los instrumentos musicales
Y como sabemos un poco sobre créditos al consumo, te aconsejamos que busques una financiación flexible, que se adapte bien a tus posibilidades en importe y plazos de devolución, y con bajas comisiones, empezando por una financiación que no tenga comisión de apertura.
Tampoco estaría de más que te aseguraras de contratar una financiación transparente y sin tener que moverte de casa. Eso de pedir cita para que te atiendan es cosa del pasado.
Puedes encontrar una financiación adecuada a tus necesidades o las del músico que vive contigo vía Internet sabiendo lo que vas a pagar y sin sorpresas. Para eso están los simuladores de préstamos personales, para escoger plazo e importe y poder ver el tipo de interés que se aplica y conocer el importe total a pagar mediante la financiación.
