Las multas en la declaración de la renta son más comunes de lo que crees. Un cambio de documento, un error en el NIF o no enviar la declaración a tiempo puede marcar la diferencia entre recibir una carta de la Agencia Tributaria o no. Para evitarte sustos, vamos a revisar las distintas infracciones que existen, cómo evitarlas y cómo recurrir en caso de recibirlas. El desconocimiento de la ley no exime de su cumplimiento, así que… ¡Toma nota!
Tipos de multas en la declaración de la renta y cómo se calculan
La clave para evitar sorpresas de la Agencia Estatal de Administración Tributaria (AEAT) o Agencia Tributaria es conocer las modalidades más habituales de sanciones.
Según la gravedad o lo que tardes en pagar la multa, tendrás que abonar una cantidad u otra. No es lo mismo presentar la declaración tarde que ocultar deliberadamente algunos ingresos para pagar menos impuestos.
Tipos de multas en la declaración de la renta y cómo se calculan
La clave para evitar sorpresas de la Agencia Estatal de Administración Tributaria (AEAT) o Agencia Tributaria es conocer las modalidades más habituales de sanciones.
Según la gravedad o lo que tardes en pagar la multa, tendrás que abonar una cantidad u otra. No es lo mismo presentar la declaración tarde que ocultar deliberadamente algunos ingresos para pagar menos impuestos.
Multa por presentar la declaración fuera de plazo
Has tenido un año con mucho ajetreo, se te va el santo al cielo y no presentas la declaración dentro del plazo legal. Esta situación pasa más de lo que crees, de hecho esta es una de las multas en la declaración de la renta más comunes.
La AEAT establece distintas consecuencias en función de si presentas tu declaración antes de que se te avise (sin requerimiento previo) o si lo haces tras ser notificado (con requerimiento previo).
Sin requerimiento previo
Si se te ha pasado la fecha límite, pero no te han notificado de ello, no es tan malo como podría ser. Eso sí, deberás presentar la declaración cuanto antes. Desde el punto de vista de la AEAT te habrás pasado de fecha, pero estarás actuando de buena fe. En caso de deber dinero, será necesario abonar un recargo, que será menor cuanto más rápido corrijas el retraso:
El recargo sobre el resultado de la declaración es de un 1 % fijo más otro 1 % adicional por cada mes de retraso. Hagamos un par de ejemplos con distintas demoras y suponiendo que tienes que devolverle a Agencia Tributaria 500 €:
- Si vas con un mes de retraso, el recargo sería del 2 % (1 % fijo + 1 % por un mes de demora), por lo que deberías abonar 510 €.
- Si llevas seis meses de retraso, el recargo ya sería del 7 % (1 % fijo + 6 % por los seis meses), por lo que la cantidad a abonar ya sería de 535 €.
Si presentas la declaración pasados 12 meses desde la fecha límite, el recargo pasará a ser del 15 %. Siguiendo el ejemplo anterior, la cantidad ascendería a 575 €.
Seguirán sin haber sanciones, cierto. Pero sí que se aplicarán intereses de demora hasta que presentes tu declaración de la renta, por lo que lo más inteligente en cualquier situación sigue siendo presentar la declaración de la renta cuanto antes.
Si necesitas una ayuda adicional para poder regularizar tu situación, podrías considerar la opción de pedir un préstamo personal que te permita afrontar la deuda y que los intereses no se acumulen con el tiempo.
Si en vez de deberle dinero a la AEAT, ella tiene que devolverte dinero a ti y no has recibido requerimiento por su parte, se aplicaría una sanción de 100 € independientemente de la cantidad que te vayan a devolver.
Con requerimiento previo
Si la Agencia Tributaria tiene que avisarte de que no has presentado la declaración, ya no hablamos de recargos como en el caso anterior, sino de sanciones propiamente dichas. En esta situación, las consecuencias son más graves, ya que se considera que no actúas por tu propia voluntad, sino impulsado por el requerimiento de la AEAT.
Esta situación conlleva el inicio de un procedimiento sancionador e implica una sanción de entre el 50 % y el 150 % del total de la deuda, según la gravedad de la infracción:
- Infracción leve: comprende aquellas que implican hasta 3.000 €, conllevando una multa equivalente al 50 % de esa cantidad.
- Infracción grave: si debes más de 3.000 €, la sanción puede oscilar entre el 50 % y el 100 %.
- Infracción muy grave: si aparte de deber más de 3.000 €, la AEAT detecta que se han empleado métodos fraudulentos o de ocultación, la multa puede llegar a oscilar entre el 100 % y el 150 %.
En caso de que la AEAT te deba dinero, pero has presentado la declaración fuera de plazo con requerimiento, se aplicaría una sanción de 200 € aparte del dinero que se te vaya a devolver.
Multa por documentación falsa o deducciones erróneas
Otro tipo de infracción muy fácil de cometer es la que se produce cuando presentas la declaración con errores, omites algún dato o haces alguna deducción indebida.
Las deducciones sirven para reducir el dinero que tienes que pagar a la AEAT. Se trata de beneficios fiscales que premian ciertos comportamientos. Cometer un error en esta situación se puede interpretar como que estás sacando provecho, por ejemplo, de las ventajas fiscales de las donaciones solidarias.
Si la AEAT considera que has intentado omitir menos de 3.000 €, la sanción inicial es del 50 % sobre la cantidad que se pretenda defraudar. Aunque se puede reducir hasta un 30 % y un 20 % adicional si regularizas la situación de forma voluntaria antes de que la Agencia Tributaria inicie un procedimiento sancionador.
Si el uso de facturas o documentación falsa fuera a omitir cantidades superiores a 3.000 € para que la declaración te saliera más favorable, la sanción que aplica la AEAT oscila entre el 50 % y el 100 % del importe que fueras a defraudar. Por ejemplo, omitir 5.000 € supone una multa entre 7500 € y 10.000 €.
Si has usado métodos fraudulentos que supongan un perjuicio a la Agencia Tributaria, como crear redes de empresas ficticias para emitir facturas falsas a gran escala o registrar bienes e ingresos a nombre de terceros, la multa puede alcanzar el 150 % del importe. Pero si hablamos de fraudes millonarios, la multa puede ser de 30.000 € hasta más de 300.000 €.
Multa por omitir ingresos
Ya sea queriendo o simplemente porque se te olvida añadir algún rendimiento, este error es sancionado y puede ser clasificado como infracción tributaria leve, grave o muy grave, dependiendo de la cantidad que se considera que se ha defraudado y si hay ocultación de información:
- Infracción leve: cuando el importe de la base de la sanción (por ejemplo, el importe que dejas de ingresar a la AEAT) no supera los 3.000 € y no existe ningún tipo de ocultación. En estos casos, la sanción suele ser del 50 % sobre la cantidad defraudada.
Supongamos que, por error, no has incluido un ingreso de 1.400 €, pero que es evidente que te falta y está a la vista. La Agencia Tributaria lo detectaría como una infracción leve y la multa equivaldría a 2.100 € (1.400 € junto a su 50 %, 700 €).
- Infracción grave: cuando se demuestra que existe ocultación o si la cantidad defraudada supera los 3.000 €, la sanción suele situarse entre el 50 % y el 100 % de la cantidad defraudada.
- Infracción muy grave: Este tipo de infracciones se reservan para los casos más extremos, con intencionalidad probada, montos muy elevados y conductas reiteradas. Utilizar facturas falsas, sociedades interpuestas o emplear paraísos fiscales para encubrir dinero…
Aquí las sanciones pueden ascender a un rango del 100 % al 150 % de la cantidad defraudada.
Además de las repercusiones financieras, es importante tener en cuenta que estas prácticas pueden conllevar la pérdida de ayudas públicas o subvenciones, e incluso podrían llevar a la suspensión profesional si tienes un cargo público.
Multa por no indicar el Número de Identificación Fiscal u otros códigos
No indicar correctamente un número de identificación fiscal u otros números o códigos, puede conllevar sanciones por parte de la Agencia Tributaria, clasificadas según el grado de infracción:
- Infracción leve: se aplica una multa fija de 150 € por cada error detectado. Si tú, como persona física o autónomo, no pones tu NIF en una factura, será una infracción leve y te podrían multar con 150 €.
- Infracción grave: si eres una entidad financiera (un banco, por ejemplo) y no cumples las normas sobre el uso del NIF en operaciones como abrir una cuenta o en movimientos de dinero, la multa es del 5% de las cantidades mal gestionadas, con un mínimo de 1.000 €.
Multas por obstruir o no colaborar con la AEAT
Además de las infracciones relacionadas con la presentación y el contenido de la declaración, debes tener en cuenta que la Agencia Tributaria te puede sancionar por no conservar documentación que respalde tus datos o no facilitar la información que se te solicita: Informes, antecedentes, libros, registros, ficheros, facturas… Deberás disponer de ellos y tenerlo todo a mano.
De no hacerlo, se podría considerar que no estás colaborando y supondrá una multa fija de 150 €. Si es la segunda vez que obstruyes o das excusas, la multa incrementa a 300 €. Incumplir por tercera vez el requerimiento supone una multa de 600 €.
Multa por no indicar correctamente el domicilio fiscal
Cuando accedes al borrador de la renta, te piden ratificar tu domicilio fiscal. Si te has cambiado recientemente de domicilio, presta atención a este paso.
Para la AEAT es muy importante la dirección, ya que será donde te podrán localizar a efectos tributarios (sí, enviarte notificaciones). De no hacerlo, podría acarrear una sanción de 250 € no actualizar este dato.
He enviado la declaración de la renta con un error. ¿Qué puedo hacer?
Si ya has presentado la declaración y leyendo este artículo te has dado cuenta de que has cometido algún error, no te preocupes. La AEAT pone a tu disposición dos opciones según a quién beneficie la corrección:
- Error favorable a ti: si te has dado cuenta de un error que implica que pagarás menos o recibirás más, deberás hacer una declaración complementaria, que consiste básicamente en presentar una segunda declaración con los errores corregidos.
El proceso se hace a través de Renta WEB en el apartado “Servicio de tramitación borrador / declaración”. Tendrás que identificarte y seleccionar “modificar una declaración”, indicar el motivo, realizar los cambios y firmarla.
- Error favorable a Agencia Tributaria: si, por lo contrario, has recibido más dinero o te toca pagar de más, deberás hacer una solicitud de ingresos indebidos en la web de la Agencia Tributaria, seleccionar “Presentación de recursos o solicitud” y el mismo proceso anterior: identificarte, realizar los cambios y firmar.
Cómo actuar ante multas en la declaración de la renta
A pesar de que la mejor forma de no pagar multas es evitar cometer infracciones, puede que en algún momento te toque enfrentarte a alguna sanción. Es esencial conocer cuáles son los plazos y cómo reclamar para hacer frente a las multas y evitar consecuencias mayores.
Notificación de la sanción y plazo para alegaciones
Cuando la Agencia Tributaria considera que has cometido una infracción, te enviará una notificación oficial de inicio del procedimiento sancionador.
En esta notificación te informarán sobre la infracción que se ha detectado, la cantidad a pagar y el plazo para presentar alegaciones, que normalmente se sitúa en un plazo de 10 a 15 días hábiles.
Pagar cuanto antes tiene recompensa: así funcionan las reducciones de la sanción
La Ley General Tributaria aplica reducciones sobre las multas en la declaración de la renta si pagas de forma anticipada o si no recurres la sanción.
Por ejemplo, si aceptas la sanción y pagas antes de los plazos establecidos, puedes obtener reducciones del 25 % o incluso más. ¿Por qué es esto? Estas reducciones tienen como objetivo incentivar tu conformidad con la sanción y la rapidez en el pago, de modo que facilita la gestión tanto para la Agencia Tributaria como para ti.
Además de los plazos, debes tener en cuenta los costes asociados como posibles honorarios de abogados, expertos en gestión tributaria y, obviamente, todo el tiempo invertido antes de iniciar una reclamación. Sin embargo, si la sanción es elevada y consideras que tienes razones sólidas, presentar alegaciones puede ser una vía útil.
Pero cuidado: si tu recurso no se considera válido, perderás las reducciones por pago anticipado y te arriesgas a un desembolso mayor.
Cómo evitar multas en la declaración de la renta en el futuro
Como en muchos casos, la prevención es siempre la mejor estrategia. Evitar multas no solo significa ahorrarte dinero, sino también estrés, preocupaciones y el riesgo de enfrentarse a largos procedimientos administrativos o judiciales.
A continuación, te ofrecemos algunos consejos prácticos que puedes poner en práctica para reducir las probabilidades de toparte con sanciones.
Mantén un registro ordenado de tus ingresos y gastos
Una contabilidad personal sólida es uno de los mejores consejos que uno puede seguir para tener una vida financiera sana. Es la clave para no cometer errores y ahorrarte dolores de cabeza.
Aunque seas un contribuyente sin actividad empresarial, tener cierto control sobre tus ingresos (nómina, alquileres, inversiones, etc.) y de tus gastos evitará en buena medida las multas en la declaración de la renta.
Guarda todas las facturas, comprobantes y extractos bancarios. De esta forma, si la Agencia Tributaria te pide justificar algún dato, tendrás la documentación lista.
Clasifica y archiva tus documentos
Si eres de los que tienen en casa un “cajón de los documentos”, ya tienes medio trabajo hecho. El siguiente paso es separar los datos por tipos de ingreso o gasto. Por ejemplo, agrupa tus nóminas del año, tus recibos de alquiler, las facturas de tu asesor, las donaciones a ONG o las inversiones en bolsa. Una vez organizado te costará muy poco mantener el orden y, si en algún momento te reclaman algo o necesitas echarles mano, te evitarás tener que ir buscando.
Organízate con apps financieras
Si no te terminas de aclarar con los papeles archivados, un buen complemento para tener una visión general de tu situación es a través de las apps financieras. Gracias a ellas, podrás conocer de un vistazo tus ingresos, gastos y mucho más: tendrás un control más exhaustivo de tus finanzas, podrás categorizar automáticamente y te será fácil identificar gastos hormiga para corregirlos.
¿La situación te sobrepasa? Contrata un asesor fiscal
Es importante destacar que la complejidad de tu declaración puede influir en el riesgo de cometer errores. Si este es tu caso y, por ejemplo, posees múltiples fuentes de ingresos, tienes una actividad económica o inviertes en arte o en bolsa puede ser conveniente contar con la ayuda de un asesor fiscal.
El asesor se trata de un profesional que te guiará en el proceso de preparación de tu declaración y responderá a todas tus dudas.
Si no quieres tener que contratar a un asesor, pero quieres mejorar tu educación financiera, te resultará interesante saber que la Agencia Tributaria organiza webinars, charlas y sesiones informativas que puedes consultar para mantenerte informado.
Presenta tu declaración con antelación
No dejes la declaración para el último día. Si lo haces con prisas, las probabilidades de cometer errores y recibir multas en la declaración de la renta. Si presentas la declaración con tiempo suficiente, tienes margen para revisar y corregir cualquier fallo antes de que finalice el plazo.
Utiliza el simulador para detectar errores
Si vas con tiempo, podrás utilizar el simulador de la AEAT para que puedas hacer pruebas antes de presentar la declaración de la renta.
Este simulador te ayudará a verificar si el resultado que obtienes es coherente y detectar algún posible error. Así, cuando llegue el momento de la presentación oficial, tendrás la seguridad de que todo está en orden.
La clave para no preocuparte por las multas en la declaración de la renta es hacer las cosas bien desde el principio: infórmate, declara con rigor y, si tienes dudas, busca ayuda profesional. Si este contenido te ha resultado de utilidad, no dudes en consultar más artículos sobre educación financiera en nuestro blog. ¡Te esperamos!