Trucos baratos para aislar tu casa de ruidos indeseados

La música que se pone, los ruidos que llegan de la calle, la mascota del de abajo o los tacones de la de arriba se hacen sentir. Qué no decir de esa lavadora inoportuna que alguien ha puesto a primera hora de la mañana y que está centrifugando…

Los ruidos de los vecinos son muy molestos. Pero pensar en que ellos también te pueden estar oyendo a ti no lo es menos. Sentir que pueden estar escuchando tus conversaciones es muy desagradable también. Por eso es imprescindible aislar tu casa de ruidos indeseados. Pero si puede ser, con trucos que no supongan demasiado coste, que no están los tiempos para alegrías de ningún tipo.

Bueno, si te ha dado por la música, sobre todo si te decantas por la percusión y vives en un piso, tendrás que invertir en una buena insonorización y convertir una de tus habitaciones en un estudio de grabación o local de ensayo. Pero para situaciones más normales, estos trucos te permitirán reducir el ruido a un nivel aceptable y a bajo coste.

Pintura aislante de ruido

Las tecnologías de la construcción también han avanzado en ese sentido. Aunque todavía no son muchas, hay marcas de pinturas que se comercializan en España capaces de crear una especia de membrana que absorbe y reduce el ruido. Están fabricadas a base de látex y agua y funcionan en los dos sentidos. Te protegen del ruido exterior y evitan que tus sonidos salgan de tu casa. No deja de ser una pintura especial. Quizás te cueste encontrarla y tengas que pagar un poco más por ella, pero es una forma rápida y sencilla de aislar tu casa. Habla con tu pintor de confianza y pide referencias si esta opción te suena bien.

Tienes dos opciones:

1. Por un lado, puedes cambiar los cristales, si tus ventanas te lo permiten e instalar otros con un grosor mínimo de 6 milímetros.
2. Por otro lado, si el ruido exterior es realmente elevado la alternativa son las dobles ventanas. Su coste se eleva mucho, pero no tendrás más opción si no quieres o no puedes cambiar de casa.

Eso sí, como las dobles ventanas exteriores afectan a la fachada, no olvides de avisar a tus vecinos en la junta. O, al menos explícale la obra al presidente para que sepa de primera mano tu intención. Por lo general, el ruido exterior es un problema común a todos los vecinos de la misma finca y no se negarán a este tipo de reformas.

El falso techo como protección contra el vecino de arriba

Si tienes niños en el piso de arriba, mascotas o una vecina que se olvida de quitarse los tacones durante el tiempo que pasa en casa, tu solución para por instalarte un falso techo con cámara de aire. Necesitas un techo lo bastante alto como para poder quitarle unos centímetros, pero dicen los expertos que es una obra rápida y limpia y que consigue reducir sensiblemente los ruidos que proceden de arriba.

Instala material para insonorizar las paredes

Si el origen de tus problemas es un vecino en tu planta, puedes sacrificar algunos centímetros en una de tus paredes, la que linda con el indeseable, para instalar algún tipo de material aislante del ruido como pueden ser la madera, las lanas naturales o minerales, las celulosas o el corcho. Posteriormente, pintas de nuevo la pared y te evitarás el ruido procedente del vecino.

También tienes materiales aislantes de obra como el pladur, del que puedes elegir en distintas densidades y grosores para evitarte el ruido, pero dicen los que saben que las primeras son más eficaces.

Libros, libros, libros…

Una forma de proteger una habitación interior del ruido es crearte un muro a base de libros. El papel es un gran absorbente del sonido, así que elevar una estantería de arriba abajo en pladur y llenarla de todo tipo de libros te creará una defensa del ruido sencilla y decorativa. Eso sí, necesitarás muchos, muchos libros.

Telas, telas, telas…

Una alternativa muy conocida por todos son las telas en el suelo, como las moquetas y las alfombras, aunque tienen el inconveniente de ser sucias y acumular polvo, lo que no conviene a los alérgicos. Además, son cálidas y no apetecen en las estaciones calurosas.

También funcionan las cortinas gruesas en las ventanas, pero hay que instalarlas bien y quitan luz. Tanto si te decides por las alfombras como si te decantas por las cortinas, los materiales más indicados son el algodón, la lana o el terciopelo. Mira presupuestos y valora si te apetece ese toque de decoración para reducir el ruido exterior.

Algunos pequeños dispositivos que ayudan

Siempre dependiendo del origen del ruido, puedes utilizar en los bajos de las puertas, sobre todo de la de entrada, almohadillas o barrederas de puertas que bloquean parte del ruido e impiden que pase el polvo. Todo es estudiar el origen del ruido y ver cómo puedes bloquearlo en alguna medida.