Puede que el culpable sea el cambio climático o puede que no, pero lo cierto es que llevamos años encadenando veranos extremadamente calurosos. ¿Los ha habido peores? Sí, aunque solo uno, el de 2003, y que junto a los de 2022 y 2023 forman el top 3 de veranos más calurosos de los que hay registro. 2024, por su lado, no pinta mucho mejor. Según la Organización Meteorológica Mundial estamos frente al año más caluroso de la historia debido al fenómeno climatológico “El Niño”. Sin duda, vamos a necesitar ayuda para pasar este veranito…
El precio a pagar para estar fresco en verano
A efectos prácticos, este aumento de temperaturas ha hecho (y hará) posible ahorrar un poco en calefacción en invierno, pero durante los meses de verano deberemos hacer un gasto extra para no pasar calor en verano. Veamos cuánto nos cuesta no sudar durante los meses con mayor temperatura.
El consumo energético, el principal gasto a la hora de evitar el calor
La mayoría de soluciones de las que disponemos para hacer frente a las altas temperaturas necesitan de electricidad para funcionar. Esto hace que nuestra factura suba durante los meses de verano. ¿Cuánto? Dependerá del número y tipos de aparatos que utilicemos, así como el número de horas que los tengamos funcionando. Pero para que puedas hacerte una idea, vamos a revisar el consumo medio de los aparatos encargados de mantener un ambiente agradable en nuestro hogar.
Los ventiladores, la opción más económica
La gran mayoría de ventiladores domésticos modernos gastan entre 40 y 100 vatios/hora. Por raro que parezca, este consumo es muy similar al de una bombilla de las antiguas. Los de techo, por ejemplo, suelen emplear unos 60 W, mientras que los típicos ventiladores de pie suelen alcanzar los 90 W.
Si queremos traducir esto a dinero necesitaremos saber el precio de nuestra tarifa eléctrica, algo que puedes consultar fácilmente en tu factura. Sin embargo, si vas a hacerlo, ten en cuenta que a no ser que dispongas de tarifa plana existen diferentes tarifas dependiendo de la hora. Para no complicarnos y no pillarnos los dedos, tomaremos un valor medio de 0,13 €/kWh, que es casi el doble de lo que puede costar en las horas clave, como por la noche.
El consumo de un ventilador medio en números:
- Precio de referencia de la electricidad: 0,13 €/kWh
- Precio medio del vatio: 0,13 / 1000 = 0,00013 €/Wh
- Consumo de un ventilador de pie: 90 W/h
- Precio de tener el ventilador encendido una hora: 90 x 0,00013 = 0,0117 €
- Precio por tener el ventilador encendido cuando dormimos: 0,0117 € x 8 horas = 0,0936 € / noche
- Precio por tener el ventilador encendido todo el día: 0,0117 € x 24 horas = 0,2808 € / día
Como ves, tener este mismo ventilador de pie encendido todo el mes (30 días) tendría un coste aproximado de 8,5 € (8,424 € para ser exactos). Evidentemente aquí solo hablamos de un ventilador, por lo que si usamos varios deberíamos sumar el consumo de cada uno de ellos.
Para que lo tengas en cuenta, existen factores que pueden hacer que tu ventilador consuma más o menos. Por un lado, los modelos más antiguos suelen necesitar más potencia para funcionar. Por el otro tenemos las velocidades. Como sabrás, la mayoría de ventiladores tienen diferentes programas (por lo general tres). El consumo de referencia que marque tu ventilador suele tomarse en velocidad máxima, por lo que si no pasamos del 2 el consumo es aún menor. Por último tenemos la suciedad, que suele pegarse a las aspas con facilidad y puede colarse en el motor, haciendo que para funcionar a la misma potencia se requiera más esfuerzo mecánico y, por tanto, un mayor consumo.
Por tanto, si queremos ahorrar en la factura de luz a través de los ventiladores deberemos:
- Limitar las horas de uso.
- Mantener los aparatos limpios.
- Tratar de no usar la máxima velocidad del aparato.
El aire acondicionado, la opción más refrescante y cara
Mientras que los ventiladores únicamente se encargan de mover el aire, los AA pueden hacer descender la temperatura de una habitación o vivienda. Sin embargo, su coste energético es mucho mayor. De hecho, es de los electrodomésticos del hogar que más consumen.
En la actualidad es posible encontrar aparatos de aire acondicionado mucho más eficientes que antes, pero la realidad es que no hay ninguno que baje de los 900 vatios… y son la excepción. De hecho, la gran mayoría consume entre los 3.000 y 3.500 W/h, que es lo habitual para enfriar una estancia de tamaño medio, aunque los modelos más potentes pueden sobrepasar los 4.000 vatios.
Para calcular su coste tenemos el mismo problema que los ventiladores: dependerá del modelo, las horas que esté encendido, la potencia y, por último, el precio que nos cobra la compañía eléctrica. Para hacer una simulación, tomaremos como referencia un aire acondicionado que consuma 3.000 W/h y los 0,13 €/kWh de valor medio de la factura, aunque no olvides ajustar las cifras en tu caso concreto.
El consumo de un aire acondicionado medio en números:
- Precio de referencia de la electricidad: 0,13 €/kWh
- Precio medio del vatio: 0,13 / 1000 = 0,00013 €/Wh
- Consumo de un aire acondicionado medio: 3.000 W/h
- Precio de tener el AA encendido una hora: 3.000 x 0,00013 = 0,39 €
- Precio por tener el AA encendido cuando dormimos: 0,39 x 8 horas = 3,12 € / noche
- Precio por tener el AA encendido todo un día: 0,39 x 24 horas = 9,36 € / día
Como ves, la diferencia con los ventiladores es notable. Mientras que tener uno encendido todo el mes nos sale por algo más de 8 €, tener un aire acondicionado funcionando ininterrumpidamente durante un mes tiene un coste de unos 280,8 €, que tendríamos que sumar a la cuantía habitual de tu factura (y siempre y cuando solo tengamos un aparato en casa, ya que si tenemos más la cosa se dispara)
Tal y como pasa con los ventiladores, la potencia puede hacer que su consumo varíe, al igual que el tipo de aire acondicionado. Mientras que los de pared suelen ser los AA más eficientes, los portátiles (o también llamados pingüinos) tienden a tener consumos incluso más elevados.
A este coste debemos sumar el mantenimiento ya que, tal y como recomiendan los fabricantes, este no solo nos permitirá evitar fallos y costosas averías, sino que garantizará que el aparato enfríe como es debido. Ten en cuenta que una fuga del líquido refrigerante hará que tu AA enfríe menos, aunque tu consumo siga siendo el mismo.
De hecho, necesitaremos que el aparato trabaje durante más tiempo (con el coste energético que ello conlleva) para alcanzar la misma temperatura. Y si te lo estás preguntando, las revisiones y mantenimientos se recomiendan una vez cada año o dos años como máximo y su coste oscila entre los 70 y 120 €.
Para tratar de reducir tu factura de aire acondicionado un poco, te damos algunos consejos de ahorro que pueden resultar muy útiles:
- Opta por modelos Inverter, ya que son mucho más eficientes.
- Evita instalar tu aire acondicionado en lugares con incidencia directa del sol.
- Si vas a refrigerar un espacio cerrado es mejor ventilar primero unos minutos, ya que así rebajamos un poco la temperatura y, por tanto, el aire acondicionado tendrá que trabajar menos.
- Si puedes, vincula su uso a la señal de los termostatos o contrólalo de forma manual.
- Intenta no bajar más de la temperatura ideal indicada en verano: 22 ºC.
- Si quieres enfriar un espacio, ve bajando la temperatura paulatinamente. Marcar una temperatura baja de entrada hará que el AA trabaje más y, por tanto, consume más.
- Evita estar encendiendo, apagando y volviendo a encender el aparato. Los expertos indican que estas acciones hacen que nuestro AA consuma de más.
- Haz uso de las funciones de programado para tener un ambiente fresco cuando llegues y evitar así tener que estar manipulando el aparato constantemente.
- Las ventanas son grandes enemigos para mantener la temperatura tanto en verano como en invierno. Invierte en un buen aislamiento para tu hogar.
Climatizadores evaporativos, una alternativa que también consume
Quizá por el nombre no te suenen, ya que también se conocen como enfriadores de aire o tecnología chill, pero todos funcionan igual: un ventilador que hace pasar el aire por agua para generar una brisa fresca. Algunas permiten también el uso de hielo o emplean esponjas o filtros humedecidos, pero viene a ser lo mismo.
El consumo de estos aparatos ronda los 1.000 vatios, lo que hace que, en términos de consumo, sean una mejor opción que el aire acondicionado. Pero cuidado, ya que hay algunos aspectos a tener en cuenta antes de contemplarlos como alternativa.
El primero y más relevante es que enfrían humedeciendo el ambiente. Esto hace que sean geniales para lugares secos, pero en sitios húmedos como, por ejemplo, las zonas costeras, la sensación de frío se reducirá sensiblemente y no harán más que generar más humedad ambiental. Cabe recordar que estar expuesto en exceso a entornos húmedos puede causar problemas de salud. El segundo factor a tener en cuenta es que al producir humedad, no es recomendable tenerlos cerca de fuentes de electricidad como enchufes o ladrones. Por último, tenemos que si no vamos renovando el agua, este aparato no deja de ser más que un ventilador que consume muchísimo.
El consumo de un climatizador evaporativo en números:
- Precio de referencia de la electricidad: 0,13 €/kWh
- Precio medio del vatio: 0,13 / 1000 = 0,00013 €/Wh
- Consumo de un climatizador evaporativo medio: 1.000 W/h
- Precio de tener un climatizador evaporativo encendido una hora: 1.000 x 0,00013 = 0,13 €
- Precio por tener un climatizador evaporativo encendido cuando dormimos: 0,13 x 8 horas = 1,04 € / noche
- Precio por tener un climatizador evaporativo encendido todo un día: 0,39 x 24 horas = 3,12 € / día
Si hacemos el estimado de un mes, nos sale una cifra total de 93,6 €, una cifra nada desdeñable a la que deberíamos sumar el coste del agua y/o hielo para que funcione adecuadamente. Tampoco podemos olvidar el mantenimiento de este aparato, ya que al trabajar con humedad, a la larga se pueden generar bacterias o hongos en su interior. La buena noticia es que al tratarse de un mecanismo relativamente simple, en la mayoría de los casos podremos realizarlo nosotros mismos.
La compra de nuevos electrodomésticos, ese gasto que llega por sorpresa
Las tiendas de electrodomésticos son de las pocas que hacen el agosto… en agosto. Bueno, en realidad empiezan unos meses antes, con la llegada del calor. Y es que a la que este despunta, muchos ven la necesidad de acudir ya sea porque nos hemos dado cuenta de que necesitamos más potencia para estar fresco en verano o, peor aún, que al ir a encender de nuevo nuestros aparatos, estos no funcionan. Y es que al trabajar solo unos meses al año, estos aparatos tienen tendencia a presentar más averías, un riesgo que podemos reducir si realizamos un buen mantenimiento.
Sea como fuere, si nos toca pasar por caja, esto es lo mínimo que vamos a tener que gastar:
Como ves los precios son de partida, por lo que si dispones de más presupuesto podrás optar a mejores opciones. Y no solo hablamos de prestaciones, sino también de eficiencia. Una buena opción para ahorrar es anticipar tus compras algún mes antes. Esto te permitirá conseguir un mejor precio en general, así como encontrar ofertas impensables durante los meses de verano. Además, durante abril y mayo no es habitual encontrar problemas de stock, mientras que si buscas justo cuando el calor aprieta, puedes encontrarte gastando de más porque ese modelo que buscabas está agotado.
🤑 Tip financiero para los que quieren un aire acondicionado:
Puede parecer que buscando el aparato por nuestra cuenta nos ahorraremos dinero, pero en ocasiones las grandes cadenas cuentan con ofertas de aparato + instalación de lo más interesantes. Y recuerda que si necesitas un dinerillo extra para acometer la operación, puedes obtenerlo fácilmente con fórmulas como el crédito directo, que te permitirá disponer de la cantidad que necesitas rápidamente y sin cambiar de banco, así como ir devolviéndolo poco a poco en cómodos plazos.
La ducha, un gasto que no puedes olvidar si quieres estar fresco en verano
Darse un chapuzón es otra de las alternativas para combatir el calor. Pero si no tenemos la suerte de contar con una piscina cerca, lo más normal es que lo hagamos en la ducha. A la hora de calcular costes dependerá de si hacemos o no uso del calentador y del tiempo que estemos bajo el agua, pero una ducha rápida tiene un coste de entre 10 y 15 céntimos. Eso sí, no podemos olvidar que España padece problemas de sequía, algo que se ve especialmente incrementado en verano. Esto, en la práctica, podría desembocar en restricciones o en un encarecimiento del agua. Pase o no, lo más sensato es valorar como se merece este recurso tan preciado y hacer un uso responsable del agua.
Como ves, estar fresco en verano depende en gran medida del tipo de aparatos que usemos y, sobre todo, de las horas de uso que le demos. Como ocurre en invierno, suele ser más eficaz tratar de mantener una temperatura estable que hacer grandes cambios de temperatura. Sigue descubriendo más acerca de economía doméstica y consejos para ahorrar en el hogar en ViveMásVidas.