Hoy te vamos a contar qué debes incluir y qué debes evitar en una buena carta o email de presentación.
Recuerda que la carta de presentación se llama también carta de motivación; es como un resumen de nuestro perfil profesional y debe llevar a la acción a quien lo lea. Para ello, debemos mostrar nuestras capacidades y lo que podemos aportar a la empresa del tipo experiencia, formación y habilidades (incluidas tus habilidades en informática).
Una carta de presentación debe hacernos destacar entre los demás, pues no se trata solo de conseguir que lean nuestro CV, sino de que lo lean el primero o con más interés que los demás. Por lo tanto, está bien copiar un modelo estándar de carta de presentación, pero no llegarás muy lejos si hay competencia, y siempre la hay.
Qué no debe faltar en tu carta de presentación
Las cartas de motivación se escriben para cada posición con el fin de demostrar que estás realmente interesado, bien preparado, que sabes qué te están pidiendo exactamente y que se lo puedes dar, y demuestras motivación y ambición.
Se basan en una estructura (una frase, una idea; un párrafo; un tema concreto) pero se ajustan todo lo posible a cada empresa y oferta.
¿Qué debe incluir una carta de presentación?
- Un buen saludo formal, pero amigable.
- Una referencia al puesto de trabajo y al lugar donde vista la oferta.
- Un par de buenas razones para que te contraten.
- Un muy breve resumen de tu historial laboral, con tus logros más destacados.
- Una frase que incite a la acción del tipo “quedo a la espera de su llamada para ampliarles esta información…”
- Unos datos personales reducidos, pero clave: Teléfono móvil
- Una buena despedida, educada, agradable y mostrando ese interés por seguir ‘hablando’.
- Un recordatorio de que el CV va adjunto o la dirección pública del CV en redes sociales profesionales (LinkedIn).
¿Qué debes evitar en tu carta de presentación?
Hay muchos errores en las cartas de presentación o motivación. Estos son los más comunes:
- Incluir más información de la estrictamente necesaria.
- Enviar la carta sin personalizar o a la persona equivocada.
- No incluir la denominación del puesto de trabajo al que te postulas.
- Utilizar un modelo estándar sin ajustarlo a ti o al puesto de trabajo concreto.
- Resumir la información del CV sin más.
- Empezar o terminar la carta con frases planas o que no motiven a la lectura de la misma o a la acción tras leerla.
- Faltas de ortografía o gramática.
- Hablar de dinero.
- Mentir o dar datos erróneos.
- Hablar mal de empresas o experiencia previas.
- Utilizar un email poco profesional.
- Olvidar adjuntar el CV.
La estructura de las ideas en una carta de presentación
Para ordenar correctamente toda la información que vamos a incluir en la carta de presentación podemos seguir una estructura de este tipo:
- Datos de contacto. Arriba a la derecha, como en una carta formal, incluyendo nombre y dirección, email, teléfono y fecha.
- Un saludo. Mejor si sabemos a quién va dirigida. Estimado Sr/Sra. X o Estimados Sres./Sras. de Recursos Humanos.
- Introducción y primera frase: a qué puesto de trabajo te postulas y porqué. Añade también dónde viste la oferta.
- Nudo de la carta. Un par de párrafos (máximo tres) desarrollando qué puedes aportar y por qué crees que el puesto se ajusta a ti. Para ello, estudia un poco la vacante y a la empresa y apunta ideas por las que te ajustas a ella.
- Evita repetir datos que ofreces en el CV y olvídate de frases manidas como la de que sabes trabajar en equipo.
- Escribe una buena última frase que invite a la acción. Recuerda que quieres que te llamen.
- Cierra la carta con una fórmula de agradecimiento por el tiempo empleado y recordando que el CV ya está en sus manos.
- Concluye con una despedida formal, pero amigable, del tipo ‘atentamente’ o ‘un cordial saludo’.
Aspectos profesionales que debes incluir en una carta de presentación
En los dos o tres párrafos del nudo de la carta de presentación, debes contar que has tenido una experiencia profesional similar o si tienes la formación adecuada para el puesto de trabajo ofrecido, así como habilidades relacionadas. Algo así como dar a entender que te ajustas a las necesidades.
También debes incluir -en la medida de lo posible- logros recientes que puedan resultar de interés a la empresa (algo de valor añadido del tipo actividades extra-curriculares). Vamos, que ofreces algo más que otros candidatos.
Cómo ganar puntos en la carta de presentación: trabajo previo de investigación
Con tu carta de presentación compites con muchos otros candidatos. Si la tuya es buena, habrás dejado competidores en el camino. Para ello, resulta indispensable demostrar que conoces a la empresa.
No pretendas ‘hacerles la pelota’ con frases de tipo quiero trabajar con los mejores y busca la forma de explicar que conoces los valores, cultura, misiones y objetivos de la misma, o sus productos, servicios, eventos, campañas populares o noticias recientes.
Investiga también la vacante para identificar qué pueden buscar y cómo puedes ser tú la respuesta o la solución con lo que tienes u ofreces.
Busca información sobre las responsabilidades diarias del puesto, o las habilidades y cualidades requeridas para poder explicar después cómo puedes ajustarte a la vacante.
Escribir una buena carta de presentación o motivación no es difícil, pero hay que trabajar en ella para competir con los otros candidatos y pasar a la segunda fase: en esa en la que leen tu CV. Con estos consejos te resultará más sencillo. También puedes ampliar más tus opciones con una candidatura espontánea.
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